a ver que os parece... para practicar.
La gota
Se agarra a la
boca del caño, inspira,
y por el peso cae, despacio,
y estalla, se desvanece.
Se agarra a la boca del caño, inspira,
y por el peso cae, despacio,
y estalla, se desvanece.
Miro a las criaturas,
rehenes del tiempo,
con las bocas de leche,
los morados y las raspaduras.
Resbalan sus cuerpos de talla ese
por el frío metal, riendo.
Se balancean, inquietos,
a lomos de caballos o elefantes sin corazón.
Intentan en vano
ascender a los cielos,
vivos y sentados.
y por el peso cae, despacio,
y estalla, se desvanece.
Se agarra a la boca del caño, inspira,
y por el peso cae, despacio,
y estalla, se desvanece.
Miro a las criaturas,
rehenes del tiempo,
con las bocas de leche,
los morados y las raspaduras.
Resbalan sus cuerpos de talla ese
por el frío metal, riendo.
Se balancean, inquietos,
a lomos de caballos o elefantes sin corazón.
Intentan en vano
ascender a los cielos,
vivos y sentados.
Yo aquí, mirando, y ellos
siempre corriendo.
¿Por qué tanta prisa?
¡Pobres criaturas!
¡Y pobre de mí!
Todos,
rehenes de la gota,
que no cesa,
que no se detiene.
siempre corriendo.
¿Por qué tanta prisa?
¡Pobres criaturas!
¡Y pobre de mí!
Todos,
rehenes de la gota,
que no cesa,
que no se detiene.
Rafa Mercé
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